Hoy hace 72 años que, a las 9’05 de la mañana, 60 bombas dejaron horror y muerte en la capital del Vallès Oriental, Granollers, ciudad de 14 mil habitantes. 5 cuatrimotores italianos dejaron caer sus mortíferas armas que soltaron 750 Tn de metralla sobre la ciudad en el momento que se despertaba, los niños iban a la escuela, madres y abuelos al mercado de la Porxada a hacer cola para intentar encontrar algunos alimentos. Todo escaseaba. Movilización de los vecinos que intentan ayudar a los heridos, personas corriendo por las calles para encontrar a su allegados , a sus hijos que como todos los días se fueron a la escuela, o los que salieron hacia el trabajo y no habían regresado. Muchos no regresarian jamás, estaban entre los muertos. Montones de cadáveres en las aceras, damnificados gimiendo reclamando ayuda, dibujaban un paisaje desolador, que algunos vecinos captaron. Hoy, gracias a aquellas imágenes se ha podido configurar un video, para mostrar a las jóvenes generaciones lo que sufrieron sus ancestros, lo que supuso para la gente sencilla -que quiere vivir en paz junto a los suyos-, aquella guerra incivil en la que perdieron todos. 224 muertos en menos de 5 minutos, en un ataque que fué silenciado por los fascistas, pocas fueron las notícias que salieron en prensa al respecto. ¿Vergüenza o desprecio? Sí mucho dolor entre la ciudadanía que nunca entendió el por qué. Famílias rotoas que nunca más saldrían a flote.