Como colofón a los múltiples actos de la Fiesta Mayor, esta noche los ciudadanos de l’Ametlla han llenado el recinto de la Font de la Mina para cenar y escuchar Habaneras acompañadas de ron, bebida habitual en estos eventos.
Mi curiosidad es grande, los ciudadanos de l’Ametlla solo salen de sus casas en tres ocasiones al año de forma multitudinaria: la noche de Reyes el 5 de enero, en fiestas de Carnaval y por la Fiesta Mayor.
Me pregunto a menudo ¿por qué se quedan siempre en sus casas y calles y plazas se encuentran desierta cual pueblo fantasma? Seguramente porque en que no existe un punto 0, un espacio donde reunirse al aire libre. Tal vez se podría solucionar convirtiendo nuestro Paseo, en completo desuso, en lugar de encuentro donde disfrutar de los amigos. Terraza, sillas, una glorieta…