Democracia, palabra clave

marzo 31, 2016

Imagino que muchos de los que pronuncian esta palabra desconocen su CONTENIDO. Todo el mundo se llena la boca pronunciándola, pero pocos han laborado para hacerla efectiva, a pesar de que figura en todos los manuales Políticos-Sociales-Religiosos…

montserrat agost 2015

DEMOCRACIA es una forma de gobierno del Estado donde el poder es ejercido por el pueblo, mediante mecanismos legítimos de participación en la toma de decisiones políticas. En lo que respecta a la política estamos corroborando que, quienes la manejan, suelen ser los peores artífices.
El mecanismo fundamental es el sufragio universal, libre, igual, directo, secreto, a través del cual elige a sus dirigentes para representarlos en un período determinado. Las elecciones se llevan a cabo por los sistemas de mayoría o representación proporcional, o combinación de ambos.
El máximo representante de los ciudadanos es quien ejerce el poder ejecutivo, es decir, el presidente del gobierno. Otros cargos ejecutivos de rango regional o local, lo mismo que cargos legislativos, son también atribuidos democráticamente mediante el voto. La democracia es el gobierno de las mayorías, pero, sin dejar de lado los derechos de los individuos ni desatender a las minorías. Las imágenes de los últimos días corroboran mi afirmación. El pueblo, en las urnas, decidió que quería unión, que se sentaran a gobernar diferentes grupos. De momento no hay unión, no se respeta la voluntad popular.

Pero, podemos hablar de Democracia en la vida diaria. No se puede traducir, se debe trabajar, sentir, practicar. En la familia, en la escuela, en el trabajo, en la sociedad. Abandonar el YO para decir nos-otros. Saber escuchar, aceptar la voluntad de la mayoría, para intentar enderezar este nuestro mundo del S XXI dolorido, aterrado por tanta masacre, y locura posesiva. Juntos, podemos encontrar caminos para enderezarlo.

Pongamos en práctica esta palabra con todo su contenido: Democracia, hasta hoy solo “utopía” por la que muchos soñamos e intentamos, desde nuestras posibilidades poner en juego.
Recuerdo que a principios de los años 80 tras las primeras elecciones en el Estado español, Darío Fo, Nobel de Paz de Cultura estuvo en Granollers para presentar su Misterio buffo dentro del XI Cicle de Teatre. Le hice una Entrevista que jamás vió la luz. Sus palabras no eran bien acogidas. Decía que en ningún lugar del mundo se vivía en Democracia. Que no nos hiciéramos ilusiones. Triste realidad que se ha confirmado.


No la defiendan. Koldo Campos Sagaseta

junio 30, 2014

koldo1

Hay quienes, no conformes con sumarse a la ilustre exhibición de baba que en defensa de la monarquía exhiben los palmeros en curules y medios, también se esmeran en “argumentar”, en aportar razones que justifique a los Borbones.
El problema consiste, sin embargo, en que es precisamente en esos acérrimos defensores de lo que tienen por el “mejor símbolo de la unidad y permanencia del Estado” en quienes reside el mayor agravio para la monarquía y sus representantes cada vez que les da por hacer juicios con los que alimentar sus patrañas, su estupidez o ambas al mismo tiempo.
El senador navarro Del Burgo, en declaraciones a la televisión vasca, razonaba la virtud de la monarquía y de su rey Juan Carlos I, porque durante sus 39 años “no perturbó el orden democrático”.
Y me pregunto ¿no perturbar es una virtud? Según el diccionario perturbar es “trastornar el orden y el estado de cosas/Quitar la paz o la tranquilidad a alguien/Hacer perder el juicio a una persona”.
¿Hay que aplaudir que el monarca no nos trastornara el orden, no nos hurtara la paz o no nos volviera locos?
En la misma línea, el ex presidente Zapatero, uno de esos de los que asegura el secretario general de su partido “tienen hondas raíces republicanas”, argumentaba a favor de Juan Carlos I que “el rey nunca ha interferido en la soberanía popular o en la acción de Gobierno”. Y vuelvo al diccionario y confirmo que “interferir” es sinónimo de entorpecer, impedir, obstaculizar…
Ya no me hago la pregunta. Para algunos, obviamente, no entorpecer es mérito suficiente como para que el Estado desembolse incontables millones de euros de unas arcas que nos dicen vacías, con tal de que una monárquica familia numerosa no perturbe ni interfiera.
No entorpecer, no interferir…el mejor currículum para encontrar trabajo.
Y en el mismo tenor, desde el actual presidente del gobierno hasta sus antecesores, que vienen a ser el mismo, he oído juicios semejantes: que no fue impedimento alguno, que siempre se mostró dispuesto a colaborar…
Otros, en parecido ejercicio, se empeñan en buscarle méritos y cometidos al monarca que expliquen su necesidad: “Es el mejor embajador que tiene España”.
Y si resulta que, después de tantas agrias discusiones, el rey es un embajador… ¿para qué queremos un rey?
¿Y no resultaría más barato para las arcas públicas que se le nombrara entonces embajador y se le asignara un sueldo por esa función, sólo a él, (exclúyanse reinas, príncipes, princesas, infantas, imputados…) al margen de las comisiones que se gane como portavoz de los grandes empresarios del Estado? O mejor aún ¿por qué no lo contratan como representante esas mismas empresas y nos ahorramos también su salario como embajador?
También para ayudar a la causa, varios dirigentes del PSOE han insistido en que su “republicanismo cívico puede ser con una forma de gobierno monárquica o republicana” porque lo fundamental es “la democracia, los valores, las reglas del juego, los contrapoderes, el respeto a la Constitución y las leyes…”. O lo que es lo mismo, que la monarquía como modelo de Estado no tiene ninguna importancia, es un asunto secundario y lo que realmente debe importarnos es el paro, la crisis… ¿Y entonces, no se podría suprimir el oneroso gasto de un modelo que no tiene importancia, que no es fundamental, que es secundario…? ¿No coinciden todos en definir a la monarquía como un símbolo? Y en estos tiempos ¿no podríamos conformarnos con la bandera o el escudo como símbolos? A ninguno de estos símbolos hay que aforar, darle de comer, comprarle un yate o pagarle safaris por los Cárpatos o Botswana.
Mejor, no la defiendan.


EL rey de España ha dimitido. República YA!!!

junio 2, 2014

Montserrat image de caraEl presidente Rajoy acaba de anunciar que el Rey Juan Carlos ha presentado su dimisión para iniciar el proceso de cambio hacia el principe Felipe. Juan Carlos llegó en tiempos complicados, impuesto por la Dictadura de Franco. No le correspondía el trono, era su padre Don Juan, el que, caso de instaurar de nuevo una Monarquia debía presidir. Pero, como siempre, NO pudimos opinar.
Han pasado 39 años tras aquella imposición. Ahora, SXXI, tenemos el derecho de decidir, votar si queremos: Monarquia o preferimos una República. Hemos crecido, madurado, pensamos, no tenemos miedo, PODEMOS OPINAR.
Nuestras VOCES deben ser escuchadas, si reamente vivimos en una Democracia, como algunos afirman. Es preciso exigir un REFERENDUM antes de coronar a nadie, para que TODOS podamos emitir nuestra voluntad de futuro. De lo contrario, la Historia juzgará a quienes NO lo permitan. Demostremos que PODEMOS!


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