Pol Aumedes Morell. Àgora. rocaumbert/espai d’arts

marzo 31, 2016

La maravilla de lo efímero pero profundo, arte puro, es la instalación-Performance que esta tarde nos ha ofrecido Pol Aumedes en Roca Umbert Fàbrica de les Arts de Granollers.

Pol Aumedes

Empezó deleitándonos con su acordeón y un repertorio musical-gráfico único, con música especial, a manera de olas de diferentes colores, texturas, formas. Música penta gramada exquisita y sugerente, “valuoso” divertimento para explicar cómo desarrolla su idea musical.
Un grandísimo Mural-Instalación vincula el pasado y el presente de RocaUmbert, lo textil de antes, fábrica de hilados/tejidos, representados por pigmentos, telas, papeles, pintura, piedras, que con pura maestría y Arte, en mayúscula, conjuga con éste su arte.
Descubrimos lo que salía de la fábrica cuando estaba en marcha, y lo que tenemos hoy, Fábrica de les Artes tras su transformación.
A través de sus trazos, Aumedes jugaba con un péndulo y un micrófono, los músicos y coro que le acompañaban emitían sones para configurar la obra plástica. No faltaron notas disonantes entre las voces múltiples de los asistentes que nos sumamos al juego.
Compartimos con el artista su espectacular viaje al mundo de los sueños y de la belleza.
Cantamos, pronunciamos palabras, emitimos sonidos especiales cuando nos mostraba con su puntero laser los pájaros que se movían en su Mural, o cuando juntos, los músicos y el coro atentos al maestro Aumedes, pronunciábamos repetidos quéeeeeeeeeeeee, o deletreábamos una uuu, o la palabra Àgora, la que preside su obra, expuesta en lo que podría ser la Plaza pública de una ciudad griega centro cultural-político-social-comercial de tiempos pasados.
Se trata pues de un punto de encuentro entre diferentes lenguajes artísticos: sonido-movimiento-trazo.
Encuentros como el de hoy, “performáticos”, enriquecen alma y espíritu, ayudan a contactar gentes diversas, posibilitan sentirse cerca de los demás, en un mundo que hace todo lo contrario, aísla a través de la TV a pequeños-jóvenes-adultos y que, si no se utiliza de forma correcta, ayuda solo a envilecer.